simplemente para recordarme
cuánta luz hay en mí
y que sencillamente
olvidé prenderla.
olvidé prenderla.
Miradas, gestos, palabras… todo se entrelaza armónicamente mientras gozo del café matinal en compañía de otras madrazas de la escuela de mis hijos. Mamás, amigas, compañeras de lamentos y alegrías, de ilusiones y frustraciones, de aspiraciones y limitaciones. Mamás que te hacen de espejo, que te cuentan y les cuentas, que reciben y comparten, que lloran y sonríen…Mamás que no se han olvidado que son mujeres con propósito, que luchan en su día a día por definir su talento dentro de los cánones patriarcales que no las deja respirar tranquilas. Mamás que entienden que poder dar a los hijos significa respetarte como mujer y como individuo además de atenderlos y educarlos. Mamás que se transforman para hacer una llamada al mundo y para contribuir con su fuerza a que haya más equilibrio, más belleza, más justicia. 
!No castres mis andares
Open a bottle of wine,